miércoles, 3 de diciembre de 2008

El Antiguo Árbol de Navidad ( Concurso de Navidad) * Posted by Jaime Olate on 2 Diciembre 2008 at 22:47




Los ojos de mi pequeña hija Andrea brillaron, cuando la tomé para colocar los hermosos adornos en el ciprés con forma cónica que tenemos desde hace años en el antejardín como árbol de Navidad.
Riendo bajó y con ojo crítico examinó su trabajo.
_ Sabes, papá, también quiero poner esa bella estrella de luces que compraste.
La ayudé, subiéndonos en la escalera de tijera, ante los preocupados ojos de mi esposa, Nany, quien respiró aliviada cuando bajamos.
_ ¡Papá! ¡Qué hermoso árbol… y tú lo conservas vivo!
Fue un momento en que mi mente guardó como una fotografía su carita radiante de alegría, pero junto con ello en el archivo de mi memoria apareció la figura de mi madrecita sonriente, mientras con mis hermanos menores le ayudábamos a colocar los adornos a la rama de pino que nos habían dado aquella Natividad, cuando éramos pequeños y el escaso dinero que ganaba mi padre en las minas de carbón sólo alcanzaba para alimentarnos.
Una lágrima pugnó por escapar de mis ojos y, Nany, conmovida, comprendió que recordaba mi felicidad de estar junto a mis padres y hermanos para celebrar el cumpleaños de Jesucristo en aquel lejano día.
La vida cambió, obtuve un espléndido trabajo para el estado y nuestra vetusta casona con piso de tierra y entablado sólo en los dormitorios, la transformamos en una acogedora vivienda. Traté de darle todo lo que pude a mamá, pero ya la mortal enfermedad se había apoderado de ella, aunque lo disimulaba. Fueron tan cortos esos años, tal vez tres, lo olvidé por el dolor de su partida tan dolorosa para ella y para nosotros; siento que no le di todo lo que debí, pues me lancé a vivir vertiginosamente sin percatarme que se nos iba.
Ahora estoy frente al ciprés con forma de pino, un hermoso árbol navideño con sus adornos y luces multicolores, junto a mi amada esposa y mi pequeña hija, pero nunca, nunca podré olvidar el viejo árbol de Navidad. ¡Qué diferencia entre aquel y éste! El antiguo en una maceta de madera hecha por mi padre, adornado con papel plateado y frutas que colgaban e iluminado con una ampolleta roja que mi viejo consiguió. ¡Jamás te olvidaré “arbolito “ de Navidad de niño pobre!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Todos los Poemas en concurso son maravillosos , este se me quedo en el alma!
Pamy